Después de varios meses de intercambio con los 2956 jóvenes que se inscribieron este año para tener la posibilidad de ingresar a las Residencias Universitarias y poder estudiar una carrera terciaria o universitaria a partir de 2022, la selección ha llegado a su fin y 334 chicos nuevos podrán ingresar a vivir a las 17 casas que ya están funcionando y a las 4 nuevas que abrirán sus puertas el año próximo.

Además de esta posibilidad para jóvenes de distintas partes del país que están alejados de los centros de estudios y no cuentan con los recursos económicos para poder asumir los gastos de un alquiler, el proyecto incorporará a 117 estudiantes externos. Estos chicos son aquellos que, aun teniendo enormes limitaciones económicas, pueden llegar a tener alguna otra opción de alojamiento o contar con algún familiar que los reciba mientras estudian, siendo acompañados desde la Fundación con los materiales de estudio, clases de apoyo y una caja de alimentos por mes para alivianar los gastos.

A pesar del crecimiento exponencial que este proyecto ha tenido en tan solo 8 años, habiendo comenzado con una casa para 12 estudiantes en Santiago del Estero allá por 2013, sabemos que son muchísimos los jóvenes que todavía necesitan esta oportunidad. Por eso, cada año nos esforzamos por seguir expandiéndolo. Todo esto es posible gracias a las miles de personas que cada mes aportan su colaboración para lograr el sostenimiento de tantos jóvenes.

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